Siempre caminaba mirando al cielo, esperando que un milagro chocase con ella en alguna librería. Paso varios años esperando a que todo le fuera mejor, esperando poder cumplir alguno de sus sueños. Nadie sabia porque no le dolía que hablaran de ella. Intentaba ser un ejemplo sin darse a conocer, intentaba cambiar mediante miradas y hojas escritas entre apuntes de colegio. Siempre era alegre, le gustaba querer no a los que le querían si no a quien ella admiraba.  Pero un día todo cambio se canso de esperar ese sueño que siempre había estado persiguiendo y eso al parecer le hundió en la miseria y le enterró dentro de ella mima, nunca más se la vio hablar de sus problemas con los demás, con sus amigas. Escribía para soltar sus penas sin llegar a decir cuales eran, no quiere mas estúpidos consejos ni un hombro en el que apoyarse. se sentó en su silla abrazándose las piernas y se perdió en la música, al parecer era lo único que le hacia sentir bien. Pero qui falta algo, las amigas ¿Qué paso con ellas? No podían evitar criticar su comportamiento, era egoísta  Aun así intentaban sacarla de su cuarto y hacerle ver que no todo es negro o blanco. Leían todo lo que escribía con el fin de intentar ver lo que le sucedía, lo evidente ya no era bienvenido en su vida así que aun no saben como ayudarla. Pero un así no creo que se rindan.